Su verdadero nombre es el “Reloj de la Plaza”. Instalado en 1927 en la esquina más famosa de La Plata, en la vereda del Pasaje Dardo Rocha frente a la Plaza San Martín, fue testigo de miles de historias de alegrías de la capital bonaerense.
Esta semana volvió a funcionar, después de años de deterioro, en los cuales hasta desapareció el mecanismo original que lo hacía andar. Su restauración y puesta en marcha forma parte de un plan de recuperación patrimonial y arquitectónica que impulsa la Municipalidad.
“Este proceso se inició con la restauración de la emblemática columna de alumbrado público sobre la que está instalada el reloj, se le pintó su base y se volvieron a instalar las luces. En la parte superior, se le restauraron sus vidrios y se puso en funcionamiento un mecanismo electrónico de agujas de tres caras”, informaron desde el Municipio.