Vecinos de la zona de Avenida 19 y esquina 37, en el barrio La Loma, se encuentran alarmados y cansados de la falta de acción por parte de ABSA ante una pérdida de agua que lleva meses sin solución. La pérdida constante de agua, que ha generado un charco permanente en la vía pública, se ha convertido en un verdadero peligro para quienes transitan por la zona.
Los residentes aseguran que, debido a la falta de intervención de la empresa de agua y saneamiento, la acumulación de agua estancada ha dado lugar a la formación de verdín sobre la vereda, lo que ha provocado varias caídas entre los transeúntes. “Una señora se partió la cabeza contra el cordón de la vereda, y eso ya es el colmo”, relató un vecino preocupado, quien pidió no ser identificado.
En las últimas semanas, varios habitantes de la zona han sufrido lesiones, algunos con golpes de distinta gravedad, al resbalarse por el verdín que cubre la zona afectada. Los vecinos sostienen que la empresa no ha mostrado interés en resolver el problema, a pesar de haber realizado varios reclamos.
“Esto ya no puede seguir así. Nos están robando el dinero, ya pagamos por un servicio que no nos están brindando. No es solo la falta de agua, es la irresponsabilidad de ABSA por no solucionar lo que ellos mismos han generado”, denunció otro residente, visiblemente indignado.
El reclamo de los vecinos no solo se centra en la falta de respuesta ante la pérdida de agua, sino también en el daño que esta situación está causando a la seguridad de los peatones. La acumulación de agua no solo ha dejado la vereda resbaladiza, sino que también ha generado problemas de higiene, ya que el agua estancada se mezcla con residuos y suciedad del entorno.
“Llevamos meses con este problema, y cada día que pasa es un día más que nuestros vecinos pueden sufrir un accidente. Es una vergüenza que la empresa no se haga responsable de los daños que está generando en nuestra comunidad”, concluyó otro vecino afectado.
La comunidad de La Loma exige una respuesta urgente de ABSA y una solución inmediata al problema que ya ha dejado varios heridos y continúa poniendo en riesgo la integridad de los transeúntes. Mientras tanto, los residentes se sienten abandonados por las autoridades y la empresa, que hasta el momento no ha dado una respuesta efectiva.
La situación, que podría haberse resuelto en cuestión de días, continúa sin solución, aumentando la preocupación entre los vecinos y generando un creciente malestar en la comunidad.